Un terremoto de emociones sacude otra vez a Cuba: el play off de la Serie Nacional de béisbol.
Año tras año es así, pero en este, existe connotación excepcional, pues se trata del desenlace del campeonato número 50 de este emblema de la nación, la pelota, nombre con el cual el pueblo suele denominar al deporte que llegó tímido a la Isla, en el siglo XIX, y en el presente la desborda y hace vibrar de San Antonio a Maisí.
Cienfuegos, Pinar del Río, La Habana y Sancti Spíritus, en la zona eliminatoria occidental, y Ciego de Ávila, Granma, Guantánamo y Villa Clara, en la oriental, clasificaron hacia la actual etapa, cuya última fase está prevista para comenzar el 20 de abril.
Son lo ocho grandes con derecho potencial a discutir las medallas, pero solo tres podrán conquistarlas.
¿Cuáles serán? En la algarabía de pasiones cautivadoras de buena parte de los cubanos, el béisbol genera un alud tan cuantioso y heterogéneo de pronósticos que el país deviene santuario de augurios.
Las predicciones van desde los criterios simples, prácticamente solo inflamados por los deseos, hasta los juicios académicos, con solemnidad de tesis doctoral.
Pero son especulaciones, incluso, los más sólidos argumentos, y ninguno podrá ser tan exacto como los resultados de los desafíos, muchas veces tan distintos a los más confiables estimados precompetitivos.
Mientras, entre adivinanzas, el comportamiento del play off desmiente a unos y aprueba a otros.
Esa realidad provoca alegrías y reveses y deposita también su sazón de contradicciones en un evento nacido en los estadios y que circula por la Isla con la fuerza de huracán.
Esa realidad provoca alegrías y reveses y deposita también su sazón de contradicciones en un evento nacido en los estadios y que circula por la Isla con la fuerza de huracán.
Es de las múltiples huellas de la pelota en los desbordamientos tropicales de la idiosincrasia del cubano, de ese deporte que -con tantas pasiones- sacude a Cuba de San Antonio a Maisí. (AIN)
----------------------------------------------------------------
This message was sent using IMP, the Internet Messaging Program.
Comentarios